Ana Romano
De
un circo
En los trapecios
la peregrinación de los ácaros
La pandereta
que amuralla secretos
retrocede frente al tamboril
Los equilibristas
guarecen sus cuerpos
Las garras
amedrentan la voracidad
del látigo
que abroquelándose
humilla al domador.
temores
engendra
pulsa
la plegaria
la hoguera de la abstinencia.
enturbian begonias
Trompetas lujuriosas
destronan zarzamoras
y las afiebradas palomas
merodean el plenilunio
El titiritero
hurguetea en el tinglado
mientras los ojos sepia
ojean la mandolina.
sujetan ese cuerpo
que clama enmudecido
Creencias que se deslizan
aguijonean oscuridades
que se acomodan en los cajones
Los recuerdos descubren
a la mujer que flaquea.